CÁMARA HIPERBÁRICA

¿QUE ES LA CÁMARA HIPERBÁRICA?

La Cámara Hiperbárica es un recinto que permite aumentar la presión ambiental inyectando aire en su interior.

Nuestra cámara hiperbárica consta de una sala principal de trata- miento y una sala secundaria (antecámara), utilizada normalmente para la entrada y salida del personal sanitario durante las sesiones de tratamiento. A la sala principal de tratamiento se accede por una puerta de dimensiones normales que permite entrar caminando , en silla de ruedas ó en camilla.

Tiene capacidad para 10 pacientes cómodamente sentados en butacas individuales

LA CÁMARA HIPERBÁRICA Y EL BUCEO

Una cámara de buceo hiperbárica o cámara de compresión puede rescatar a un grupo de personas atrapadas en un submarino hundido, así como finalizar una descompresión en superficie que no se haya realizado correctamente durante una inmersión. Estas cámaras tratan la enfermedad por descompresión cuando ocurre y alivian enfermedades no relacionadas con el buceo como anemia severa, abscesos cerebrales, quemaduras y muchas otras. También se utilizan para el entrenamiento de buceadores y experimentos científicos.

Una cámara de descompresión de buceo funciona combinando altos flujos de oxígeno puro con una presión superior a la atmosférica. Es posible alcanzar y mantener diferentes presiones ambientales dentro de la cámara para simular la presión que sufre un buceador en profundidad.

Así, las cámaras de buceo se utilizan para realizar tratamientos de oxigenoterapia. La cámara de buceo hiperbárica permite que los pulmones reciban mucho más oxígeno del que sería posible al respirar a una presión de aire normal.

Una cámara de descompresión de buceo tiene forma de cilindro, generalmente de acero, con un compartimiento estanco sellado. El interior es lo suficientemente grande como para que quepa, al menos, un ser humano acostado o sentado.
Las cámaras de compresión tratan diversas enfermedades.

Las más relacionadas con el buceo son la intoxicación por CO2, la embolia gaseosa y la enfermedad descompresiva (DCI).

Hay diferentes tipos de cámaras de buceo. Hay cámaras de descompresión submarinas y sistemas hiperbáricos que operan en la superficie.

Dentro de los usos más importantes para el buceo, podemos distinguir las cámaras de descompresión y las cámaras de recompresión.

Las cámaras de descompresión pueden estar en el agua o en tierra y se utilizan principalmente para buzos que trabajan con suministro de aire exterior, por ejemplo, buzos militares o comerciales. Estos buceadores pasan mucho tiempo bajo el agua a grandes profundidades. Las cámaras de descompresión les permiten terminar el proceso de descompresión en la superficie.

Las cámaras de recompresión terapéuticas son las que se utilizan para tratar la DCI y tratar otras enfermedades.

Como hemos dicho, estos son tipos de usos para una misma tecnología y no aparatos diferentes.

Como explicamos en el artículo Principios de descompresión de los buzos: todo lo que necesita saber sobre ellos , la DCI ocurre cuando nuestro cuerpo no puede eliminar el nitrógeno disuelto en la sangre mientras buceamos.

La mejor manera de evitar este problema es bucear dentro de los límites del buceo sin descompresión o, para buceadores más avanzados, hacer las paradas de descompresión necesarias para eliminar el nitrógeno disuelto del cuerpo.

Los síntomas de DCI incluyen dolor en las articulaciones, hormigueo o entumecimiento en las extremidades, náuseas, dolor de cabeza y fatiga. Cuando aparecen estos síntomas, el paciente es tratado en una sala de descompresión o cámara de buceo hiperbárica.

Se somete al paciente a una presión atmosférica de 3ATA o superior y se le proporciona oxígeno medicinal a través de un inhalador. Estas condiciones de presión permiten que los pulmones procesen mucho más oxígeno que respirar oxígeno puro a una presión de aire normal. Además, el aumento de la presión reduce el tamaño de las burbujas de nitrógeno acumuladas en el cuerpo, mientras que el oxígeno extra acelera su evacuación.

El tratamiento incluye tres fases:

Presurización. Durante 10 a 15 minutos, la presión aumenta lentamente y los pacientes deben igualar los oídos.

Tratamiento. Cuando la cámara de descompresión de buceo alcanza los niveles de presión prescritos, el paciente recibe oxígeno durante aproximadamente dos horas.

Descompresión. Después del tratamiento, la presión en la cámara de buceo vuelve a los niveles normales. La presión disminuye lentamente, simulando un ascenso muy lento, lo que permite que los tejidos del buzo desgasifiquen lentamente el nitrógeno. Personal médico especializado desde fuera de la máquina controla las fases y las constantes vitales del paciente.

Excepto en casos extremadamente severos, que necesitarán repetir el tratamiento, los pacientes se recuperan completamente después de un tratamiento correcto en una cámara de buceo hiperbárica.

¿Qué hacer si sospechas de una enfermedad descompresiva?

Según DAN, la persona a cargo debe trasladar al buzo lesionado a la sala de emergencias del centro de medicina hiperbárica más cercano. Mientras tanto, el buzo debe respirar oxígeno bárico normal al 100%.
Sin embargo, ha habido casos en los que los síntomas han aparecido hasta 36 horas después de la inmersión. Solo un médico puede diagnosticar la enfermedad por descompresión, por lo tanto, acude al médico a la primera sospecha.
Los médicos estabilizarán al paciente y descartarán otras enfermedades, como neumotórax, infarto de miocardio, etc.

 

LA CÁMARA HIPERBÁRICA DE IMETISA

La cámara hiperbárica de IMETISA tiene unas dimensiones de 6 m de longitud x 2,30 m. de diámetro, permite una presión de trabajo máxima de 6 ATA (atmósferas absolutas), y está dividida en dos módulos:


Cámara principal, con capacidad para el tratamiento de 10 pacientes sentados y un espacio para pacientes en camilla.
Antecámara, conectada con la cámara principal, que permite la entrada y salida del personal médico y de enfermería, o el tratamiento de 4 pacientes sentados.
A ambos módulos se accede por amplias puertas rectangulares de 95 cm de anchura y 184 cm de altura, que permiten un cómodo acceso caminando, en silla de ruedas o camilla.


Los asientos, con reposabrazos y tapizados en material textil antiestático e ignífugo, están diseñados para permitir un cierto ángulo de giro y balanceo que confieren un adecuado grado de confort.


Cada puesto de tratamiento dispone de sistema de administración de oxígeno mediante mascarilla buconasal de silicona antialérgica, pul- sador de llamada al enfermero asistente y conexión para audición musical mediante auriculares.


Ambos módulos cuentan con aire acondicionado, altavoces para música ambiental, sistemas de comunicación mediante voz y circuito cerrado de televisión, sondas para el control ambiental de nivel de oxígeno, CO2, humedad relativa, presión y temperatura, extintores hiperbári- cos manuales y sistema contraincendios mediante rociadores con accionamiento mediante electroválvulas y manual.

EQUIPO TÉCNICO DE LA CÁMARA HIPERBÁRICA

CLUBS DE BUCEO ADSCRITOS

Sociedad Canaria de Medicina Subacuática e Hiperbárica SOCAMSEH

La Medicina Hiperbárica y Subacuática tiene una gran importancia en nuestra Comunidad Autónoma, no sólo por el hecho de que exista una actividad creciente del mundo del buceo en nuestro archipiélago, tanto profesional como deportiva y recreativa, sino por constituir una ayuda fundamental en el tratamiento de enfermedades y sus complicaciones, muy frecuentes en nuestra población, como el pie diabético o las secuelas de la radioterapia, entre muchas otras.

Imetisa colabora con la Sociedad Canaria de Medicina Subacuática e Hiperbárica, apoyando en acciones y líneas de actuación para el desarrollo de la Medicina Hiperbárica en Canarias